Mark Oliver Everett, el llamado «Kurt Vonnegut del rock» y líder de la banda eels, ha tenido una vida marcada por la tragedia, el humor negro y la música. Desde la muerte repentina de su padre, el físico cuántico Hugh Everett que se perdió en su propia y notable interpretación de los universos múltiples hasta una sucesión de pérdidas familiares y personales, la biografía de E es tan dura como fascinante. En este libro, Everett narra con honestidad, ironía y una sensibilidad muy particular cómo encontró el cadáver de su padre, cómo se fue encadenando una serie de desgracias, y cómo la música se convirtió en refugio, tabla de salvación y manera de darle sentido al caos. Vista desde fuera, su historia podría parecer un relato clásico: chico tímido y maldito que descubre la música, se muda a Los Ángeles y, a fuerza de tenacidad y algo de suerte, consigue su primer contrato discográfico. Pero, al mismo tiempo, es el retrato íntimo de una vida golpeada por la muerte: a la de su padre le seguirán la de su madre, la del mánager de la banda y la de una tía azafata en uno de los aviones secuestrados el 11 de septiembre. Entre duelo y duelo, eels seguirá creando algunos de los discos más importantes e influyentes del rock alternativo contemporáneo. Curiosa, melancólica y mordaz, esta autobiografía musical es un libro tan único como el género de Everett: frágil, incómoda, a ratos devastadora, pero atravesada por un impulso luminoso que sigue vivo. Sigue vivo, y precisamente de eso va este libro.